El disco de freno es uno de los elementos principales de seguridad del automóvil. En el artículo, examinaremos el principio de funcionamiento de los frenos de disco, los principales signos de desgaste y los criterios claros de cuándo se requiere reemplazo.
Antes de comenzar a leer este material, el equipo de Auto30 recomienda encarecidamente prestar mucha atención al estado del sistema de frenos, sus componentes y conjuntos. De esto dependen directamente su vida y salud. Tómese el contenido del artículo con toda seriedad.
El disco de freno es uno de los elementos clave de la seguridad del automóvil. A pesar de los materiales resistentes con los que está fabricado, esta pieza está sujeta a desgaste y daños debido a cargas constantes y condiciones de operación difíciles.
Los frenos de disco aparecieron a mediados del siglo XX y rápidamente se convirtieron en estándar para la mayoría de los automóviles de pasajeros. Hoy en día, alrededor del 90 % de los autos nuevos están equipados precisamente con ellos, gracias a su eficiencia, simplicidad de diseño y costo accesible.
Sin embargo, este sistema también tiene una desventaja: la pequeña área de contacto de la pastilla con el disco requiere una mayor presión en el sistema de frenos, lo que acelera el desgaste de ambas piezas.
Las cifras exactas varían según el fabricante del automóvil y los propios discos. Los valores promedio de kilometraje son solo una referencia, y el desgaste real depende de muchos factores.
Muchos propietarios de automóviles se preguntan dónde encontrar información sobre el grosor aceptable. La respuesta es simple: está indicada en el propio disco. Los fabricantes marcan en el borde dos cifras: el grosor inicial y el mínimo permitido. Si el disco se ha desgastado hasta la segunda marca, su uso adicional no es seguro.
Pero además del desgaste natural, el estado de los discos también se ve afectado por el estilo de conducción, especialmente la conducción agresiva en condiciones urbanas.
El signo principal es el cambio en el comportamiento del automóvil al frenar. Si al detenerse bruscamente se siente una vibración en el volante, es hora de revisar los discos. Para un diagnóstico preciso, es mejor quitar la rueda e inspeccionar la pieza.
Las mediciones se realizan con un calibre vernier en varios puntos: el desgaste puede no ser uniforme. También es importante verificar la superficie en busca de arañazos profundos, rebordes y otros daños. Si se detectan defectos, es hora de considerar la reparación o el reemplazo.
Hay pocas opciones:
Algunos conductores intentan ahorrar y recurren a métodos peligrosos, como instalar pastillas adicionales para compensar el desgaste del disco. Esto puede llevar al bloqueo de los frenos en marcha y a la pérdida de control.
El retraso en el reemplazo de discos desgastados no solo amenaza con reducir la efectividad de la frenada, sino también con dañar otros elementos: pistones de cilindros, CV joints, rótulas. Al final, el "ahorro" resultará en gastos más serios.
El disco de freno es un elemento de desgaste, sujeto a un desgaste intensivo y diversos daños. En una frenada brusca, su temperatura puede alcanzar los 400°C, y si en ese momento cae agua sobre la superficie caliente, las consecuencias pueden ser críticas. Las grietas son solo uno de los problemas potenciales; mucho más peligrosa es la deformación del disco, que se manifiesta con vibración al frenar. Con el tiempo, las microgrietas se convierten en surcos profundos, que deterioran la eficacia del sistema de frenos.
Otro factor de desgaste acelerado es la entrada de arena y suciedad entre el disco y las pastillas. Esto lleva a la aparición de canales, reduciendo la superficie de contacto y, como consecuencia, la fuerza de frenado. Además, las pastillas desgastadas contribuyen al desgaste irregular del disco.
Signos característicos de desgaste:
La vida útil de los discos de freno depende directamente del estilo de conducción. Los amantes de las salidas bruscas y frenadas de emergencia deben estar preparados para el desgaste acelerado tanto de las pastillas como de los propios discos.
Cuiden el estado de los discos de freno: de ello depende su seguridad. ¡Buena suerte en el diagnóstico y la reparación oportuna!